Contáctanos /Contacta-nos aqui

No dudes en ponerte en contacto con nosotros para cualquier consulta o sugerencia. ¡Estamos aquí para ayudarte!
Não hesite em entrar em contato conosco para sugestões ou perguntas. Estamos aqui para ajudar!

Ubicación / Localização:

Hacienda de la Luz

Hacienda de la luz, s/n, 21820 Lucena del Puerto, Huelva

Hacienda de la Luz

 

Historia

Español

En 1409 nació en la entonces Villa de Moguer el que luego sería ilustre caballero Don Diego de Oyón y Sánchez, por voluntad de quien se erigiría, a su fallecimiento, el impresionante Monasterio de Santa María de la Luz, actualmente conocido por Convento de la Luz, de la Orden de los monjes jerónimos, principal institución monacal en la España de los siglos XV y XVI.

Don Diego inició su andadura profesional como paje del ilustre señor Luis Fernández Portocarrero, señor de la Villa de Palma del Río y de la Villa de Hornachuelos.

Bajo el cobijo de aquel noble estudió Leyes y se casó posteriormente con la ilustre señora Doña María de Cárdenas. Consumado jurista fue a la Corte Real de Castilla como procurador del poderoso Duque de Medina-Sidonia, Conde de Niebla, y consiguió una real cédula para que la ciudad de Gibraltar y la Villa de Jimena pasaran a formar parte de las propiedades de éste. En agradecimiento, el duque lo hizo alguacil mayor de Gibraltar, el 18 de septiembre de 1466. Don Diego de Oyón pasó a ser caballero de la casa iliplense, siendo nombrado en 1474 regidor perpetuo de la villa de Niebla y en 1476 corregidor del Condado.

Como pago de sus múltiples y notorios servicios, el V Conde de Niebla, don Juan Alonso Pérez de Guzmán, le entregó la Hacienda de Parchilena, mágico lugar donde decenios más adelante se erguiría el Convento de la Luz.

En 1491, Diego de Oyón otorga testamento a favor de los monjes jerónimos de Guadalupe (Confirmado por el de su señora, en 1495), cediéndole, todos sus bienes, con la única condición de que erigiesen en los terrenos de la antigua Hacienda de Parchilena un Convento en honor de Nuestra Señora de la Luz, en el que tenían que habitar con carácter permanente un mínimo de doce monjes, que asegurasen la celebración de misas diarias por su alma y las de sus familiares directos.

El general de la Orden Jerónima había encomendado al monje de Guadalupe, Fray Juan de Siruela, la erección del Convento de la Luz.

Al cabo de los años, Fray Juan de Siruela, primer prior del convento de la luz, sería nombrado prior de Guadalupe y atendería a su lecho de muerte al rey Fernando el Católico. A lo largo de más de tres siglos de vida monacal, hasta que en 1836 se exclaustra por la desamortización de Mendizabal, el Convento de la Luz fue un foco de espiritualidad, cultura, ciencia y riqueza agrícola. Un hecho luctuoso fue la ocupación y devastación por parte de las tropas francesas en la Guerra de la Independencia de 1908, que por su posición privilegiada eligieron como centro de operaciones.

La propiedad del monasterio pasó en 1836 al capitán de navío Ramón de Urzaiz, que posteriormente emparentó con la familia Pérez de Guzmán, que lo mantuvo en su poder hasta 1972, cuando fue adquirido por Enrique Clauss von Radecki. Desde la desamortización había vuelto a su condición de hacienda-cortijo, con explotación de vinos y aceites. Enrique Clauss inició con su compra una profunda restauración del convento, que se encontraba entonces sumido en un importante deterioro.

 

Trascurridos cuarenta años desde entonces, hoy el Convento de la Luz luce, y nunca mejor dicho, su mejor imagen, digna de su Advocación original, Nuestra Señora de la Luz, inspirada en el siglo XV por su homónima Virgen de Guadalupe.

El complejo monumental se alza sobre un cerro cercano al núcleo urbano de Lucena del Puerto (Huelva). Destaca por su majestuosidad y sencillez, constituyendo una arquitectura parlante de épocas diversas, un conglomerado de estilos que hicieron necesaria su catalogación como Bien de Interés Cultural en 1985.

Hoy, ofrece sus espacios abiertos y cerrados para la celebración de catering de bodas y todo tipo de eventos privados.

 

---

Português

Em 1409 nasceu na então Villa de Moguer aquele que mais tarde viria a ser um ilustre cavaleiro, Don Diego de Oyón y Sánchez, por testamento de quem o impressionante Mosteiro de Santa María de la Luz, actualmente conhecido por Convento de la Luz, viria a ser erigido após sua morte, da Ordem dos monges Jerónimos, a principal instituição monástica de Espanha nos séculos XV e XVI.

Dom Diego iniciou a sua carreira profissional como pajem do ilustre senhor Luis Fernández Portocarrero, senhor da Vila de Palma del Río e da Vila de Hornachuelos.

Sob a proteção daquele fidalgo estudou Direito e casou posteriormente com a ilustre senhora Doña María de Cárdenas. Jurista talentoso, dirigiu-se à Corte Real de Castela como advogado do poderoso Duque de Medina-Sidonia, Conde de Niebla, e obteve um decreto real para que a cidade de Gibraltar e a Villa de Jimena passassem a fazer parte das suas propriedades. Em agradecimento, o duque nomeou-o xerife de Gibraltar a 18 de setembro de 1466. Dom Diego de Oyón tornou-se cavaleiro da casa Ilipense, sendo nomeado vereador perpétuo da cidade de Niebla em 1474 e magistrado do condado em 1476.

Como pagamento pelos seus múltiplos e notórios serviços, o V Conde de Niebla, Don Juan Alonso Pérez de Guzmán, deu-lhe a Hacienda de Parchilena, um lugar mágico onde décadas mais tarde surgiria o Convento de La Luz.

Em 1491, Diego de Oyón concedeu um testamento a favor dos monges Jerónimos de Guadalupe (confirmado pelo da sua mulher, em 1495), cedendo-lhes todos os seus bens, com a única condição de que fossem construídos nos terrenos da antiga Fazenda de Parchilena , Convento em honra de Nossa Senhora da Luz, no qual deveriam residir, permanentemente, um mínimo de doze monges, para garantir a celebração das missas diárias. pela sua alma e pela da sua família imediata.

O general da Ordem Jerónima confiou ao monge de Guadalupe, Frei Juan de Siruela, a construção do Convento de La Luz.

Com o passar dos anos, Frei Juan de Siruela, primeiro prior do Convento da Luz, seria nomeado prior de Guadalupe e atenderia o rei Fernando, o Católico, no seu leito de morte. Ao longo de mais de três séculos de vida monástica, até ao seu encerramento em 1836 devido ao confisco de Mendizabal, o Convento de la Luz foi um foco de espiritualidade, cultura, ciência e riqueza agrícola. Um triste acontecimento foi a ocupação e devastação pelas tropas francesas na Guerra da Independência de 1908, que pela sua posição privilegiada escolheram como centro de operações.

A propriedade do mosteiro passou em 1836 para o capitão Ramón de Urzaiz, que mais tarde se tornou parente da família Pérez de Guzmán, que o manteve na sua posse até 1972, altura em que foi adquirido por Enrique Clauss von Radecki. Desde o confisco que voltou ao estatuto de hacienda-cortijo, com exploração de vinhos e azeites. Com a sua compra, Enrique Clauss iniciou uma restauração profunda do convento, que se encontrava então em grave deterioração.

Passados ​​​​quarenta anos, hoje o Convento da Luz exibe, e nunca melhor dito, a sua melhor imagem, digna da sua Invocação original, Nossa Senhora da Luz, inspirada no século XV na sua homónima Virgem de Guadalupe.

O complexo monumental ergue-se numa colina perto do centro urbano de Lucena del Puerto (Huelva). Destaca-se pela sua majestade e simplicidade, constituindo uma arquitectura falante de diferentes épocas, um conglomerado de estilos que tornou necessária a sua classificação como Bem de Interesse Cultural em 1985.

Hoje oferece espaços abertos e fechados para catering de casamentos e todo o tipo de eventos privados.